sábado, 4 de agosto de 2012

Tus pecados son mis mandamientos...

Puede que no te tenga,
puede que no seas mía,
pero te amo más que a nada,
y por ti daría mi vida.

El día que te pase algo,
no me lo perdonaré,
porque por ti mataría,
una y otra y otra vez.

Preso de tu cuerpo...

Condenao de por vida,
estoy condeao a quererte,
aunque no le temo a nada,
tan solo temo perderte.

El perfume de tu cuerpo,
esa noche me hechizó,
convirtiendome en cautivo,
de tu luz y de tu amor.

Niña nunca me abandones,
que eres dueña de mi cuerpo,
cuando paso las horas contigo,
y parece todo un sueño.

Soledad,inmensa soledad...

Infinita e indescriptible,
así es la soledad,
porque siempre irá contigo,
y jamás te abandonará.

Sin condiciones ni trampas,
se volverá fiel amiga,
y te acompañará,siempre,
hasta el final de tus días.